El mal gusto de Sandra Gómez, nuestra vicealcaldesa

Sandra Gómez, vicealcaldesa de Valencia y secretaria general del Partido Socialista de esta ciudad, nos ha sorprendido con una felicitación de Navidad absolutamente desacertada, inadecuada y claramente inoportuna.

La única explicación a esta ofensa gratuita a la comunidad cristiana valenciana y al buen gusto del resto de sus conciudadanos, es que pretenda hacer méritos ante los dirigentes del nuevo Partido Socialista Obrero Español. Porque, según me aseguraban hace dos años amigos que la tratan con cierta frecuencia, es una mujer solvente y, utilizando el argot popular, “con cabeza”.

La imagen, sobradamente difundida, presenta a una supuesta Virgen María en pleno parto natural y con imágenes explícitas de un niño que ya asoma la cabeza. Y el pretexto aducido es defender el valor de la mujer y su papel imprescindible como madre en la familia y en la sociedad.

Y lo ha hecho, según parece, empleando frases tan finas como esta que escribió en su perfil. “Que el día de hoy sirva para recordar lo maravillosas […] que son las mujeres. (Y para que recordemos también cuánto vale nuestro coño) -, Levante-EMV

Es decir, aprovecha el momento navideño para reivindicar el feminismo radical con frases tan agresivas como falsas, ya que quién nació en Belén no fue Dios, para los cristianos “el no nacido”, sino su Hijo. Y debería saber muy bien, seguro que lo sabe, que el misterio de la vida va mucho más allá de un parto.

Y, por supuesto, no voy a entrar en un debate sobre el feminismo porque el hecho de la Navidad, de la Natividad, tampoco debe ser palanca adecuada para debates políticos o sociales.

Los cristianos, señora Gómez, sabemos sin que usted nos lo explique que Jesús nació de María y que sería un parto natural porque José buscaba para ella un lugar en el que parir y mantener caliente a su hijo. Ningún ángel construyó para ellos una cavidad de estrellas cálida y acogedora. Ni siquiera influyó para que encontraran una posada más adecuada para el alumbramiento.

Y todos sabemos lo que es un parto natural sin necesidad de que nos dé una lección de anatomía o de ginecología con la imagen que ha elegido. Por lo que su extraña felicitación y el motivo que la acompaña no hacen más que poner en evidencia una personalidad cobarde, cínica y antisocial.

Cobarde porque usted no proclama el valor del parto, que es algo sublime, el día dieciséis de Junio, pongo por caso, sino que lo hace aprovechando el tirón social y religioso de las fiestas navideñas y señala a María como sujeto de su argumentación.

Desconozco si usted es católica o no, aunque parece no serlo porque  nos ofende gratuitamente. No voy a contarle el consabido “por qué no se mete con otras religiones” porque yo no quiero que se meta con ninguna de ellas. Ni con el mundo islámico, mayoritariamente pacífico pese a la imagen alterada por el fanatismo minoritario, ni con ninguna de las demás reconocidas en la faz de la tierra.

Es cierto que la católica es la más “inofensiva” del momento porque ni contesta con represalias físicas ni con denuncias en los tribunales, pero no se trata de eso. La iglesia católica, ella lo sabe y por eso se “arriesga” a ofenderla, es como los sacos de entrenamiento de boxeadores, que no reaccionan ante los golpes.

Opiniones más o menos airadas aparte, nadie la va a atacar y no corre más riesgos que escuchar algún que otro reproche de los que se crucen en su camino.

Su desatino es lo menos que se puede esperar de una persona culta, usted es universitaria y supuestamente tolerante por ser socialista, en el antiguo concepto del socialismo. Y si es atea, o agnóstica o lo que quiera ser, disfrute de la parte lúdica de estas fechas, compre regalos, cene con su familia si son seis o menos y déjenos en paz con nuestras ideas, nuestras tradiciones y, si me apura, con nuestros errores.

Es cínica por lo que digo anteriormente. Porque juega al doble juego de celebrar la Navidad, una fiesta religiosa y hacerlo a su manera, utilizando su tirón social como amplificador de sus ideas o de su valor como dirigente del PSOE. Es cierto que no insulta a la Virgen ni a los católicos directamente, faltaría más, pero es un ataque claro a la fe cristiana que idealiza y magnifica la figura de María como madre de la cristiandad.

Y es antisocial porque con esta “felicitación” ofende gratuitamente a una parte importante de la sociedad que, siendo católicos o no, respetan a los que si lo somos y también el buen gusto en los mensajes.

Nuestro presidente de gobierno no ha pronunciado ni una sola vez la palabra Navidad, y hay muchos que llaman a estas fechas las de la amistad, o las de la familia, o lo que quieran llamarla, pero sin ofender a los que le damos el sentido cristiano que nosotros le damos.

Así que, Señora Gómez, siga haciendo méritos a costa de ofender o intentar humillar a parte de la ciudadanía. Yo por mi parte le deseo un año mejor que el que estamos terminando, un mejor juicio para tratar temas tan sensibles como este y, aunque no soy de dar consejos, un reajuste en su concepto del feminismo porque este, se lo aseguro, no mejorará para nada su carrera política.  

Feliz 2021, año en el que, pase lo que pase, volveremos a tener una Navidad.

Y espero, por el bien de la humanidad, que no se descubra una placenta artificial en la que hacer crecer un óvulo fecundado porque, desde ese momento, el valor de su coño, perdóneme la expresión pero es usted quién la ha utilizado, perdería muchos, muchos enteros para su extraño feminismo militante.

Que así no sea.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s